LLueve, llueve, llueve y vuelve a llover....
Desde que nos hemos levantado ésta mañana, no ha parado ni un momento (ni tampoco lo ha hecho en toda la noche).
Ahora son las 17 hrs y por no estar todo el día sin hacer nada, (aunque la lluvia es una buena excusa que invita al relax), hemos comprado unos chubasqueros de plástico (parecemos dos bolsas de basura de colores), y vamos a intentar regatear un poco por pasar la tarde y hacerla más amena.
Llegamos al primer puesto de la calle principal, preguntamos el precio de una maleta porque aunque hemos comprado poco, no nos iría mal ir un poquito más desahogados de equipaje. No conseguimos que nos la rebajen a 1500 bath, que es lo que nos hemos propuesto gastar para ello.
Así que vamos entrando de tienda en tienda, y a medida que avanza la tarde, nos damos cuenta de que casualmente todos nos ponen precios similares pero...qué casualidad que al hombre o dueño que nos despacha siempre le suena el teléfono cuando entramos!! Nos vigilan de cerca.... Y encima con tanto rebajar, se mosquean con nosotros!
Pero sabemos que pueden llegar a los márgenes que les pedimos, porque a una vendedora la pillamos in fraganti! Nos dice que sí al precio y luego, cuando le apretamos más, dice que va a ver si su jefe le da permiso. Así que llama, y luego nos da el doble del principio!!! Conclusión: les hemos herido el orgullo de vendedores...y nosotros nos quedamos sin maleta..jajaja! De momento aguantamos con lo que tenemos, pero en Bangkok, no hay escape.
Así pasamos la tarde, no porque queramos, sino porque a parte de hacer tiempo tomando un helado en el Haagen Dazs, un refresco en el Black Canyon y leer un libro, en un día de lluvia y viento por aquí, no hay más que hacer.
Y cuando decimos lluvia....es la peor de las lluvias de España, pero sin parar ni un minuto en 24 horas!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario